La aplicación Línea Verde se consolida en Miranda como una herramienta para facilitar la comunicación entre Ayuntamiento y vecinos con casi 1.500 interacciones
La revolución tecnológica se ha sentido en muchos aspectos cotidianos. Como muestra de ello está la implantación en la ciudad de la sede electrónica pero este no es el único beneficio que se ha sacado del desarrollo de las nuevas tecnologías. Una de las primeras mejoras que se implantó fue la aplicación de la Línea Verde, que se empezó a utilizar en hace tres años.
En junio de 2015 vio la luz en Miranda y a día de hoy se rozan las 1.500 interacciones entre el Ayuntamiento y los vecinos. Para esto surgió, como una vía más para llegar a la administración a través de un elemento que a día de hoy se ha convertido en una herramienta más que cotidiana: los teléfonos inteligentes.
El responsable dentro del equipo de Gobierno de gestionar esta aplicación es el concejal de Obras y Servicios, Adrián San Emeterio, que sigue destacando cómo este mecanismo de comunicación se ha consolidado y tras tres años se mantiene con «un goteo constante» de avisos para reparar, sustituir o modificar algún elemento.
Hace un año se llegó a las 1.136 ‘interacciones y a día de hoy la cifra ha alcanzado las 1.463. De todas estas incidencias comunicadas por parte de los usuarios, la categoría que se lleva un mayor porcentaje es la de aceras y calzadas. Un 19% del total tienen como objetivo sustituir o reparar estos elementos, algo que no es casual, puesto que Línea Verde se entiende por parte del Ayuntamiento como una herramienta propicia para este tipo de situaciones, porque como resalta San Emeterio, desde su departamento a veces es difícil llegar a todos los puntos de la ciudad en los que pueda surgir alguna incidencia.
En segundo lugar están las quejas relacionadas con el servicio de limpieza con cerca de un 15% de las quejas. En este sentido, hay que tener en cuenta que el nuevo contrato todavía está pendiente para lo que reta de 2018, después de haber sacado el pliego y haberlo tenido que retirar puesto que había que hacer alguna modificación.
No obstante, San Emeterio destaca que el proceso está a punto de concluir «y está bastante avanzado para publicarlo otra vez, con las correcciones que eran necesarias para sacarlo a contratación». Una situación en la que no se avanzan fechas, pero sí que se apunta a que «será en días», confiesa.
Con este nuevo contrato se esperan que puedan solucionarse o reducir las quejas con el servicio porque este 15% no es el único que tiene relación con la gestión de la limpieza municipal, puesto que los avisos con la recogida de basuras supone un 8,5% del total.
La tercera categoría como tal, dentro de las quejas o sugerencias vecinales, tiene que ver con el mantenimiento de los parques y jardines. Algo que se nota especialmente en esta época primaveral, donde el crecimientos es mayor que en otras estaciones del año. Un 11% de las 1.463 han tenido como foco este problema, cifras porcentuales que en cualquier caso son similares a las de otros años, puesto que «con número tan altos les cuesta moverse bastante», apunta San Emeterio para justificar esta situación.
En cuarto lugar, y todavía con un 10% dentro de la incidencia total, está el alumbrado público. Una categoría que se sigue contemplando en la Línea Verde a pesar de que el mantenimiento del servicio ya no está en manos municipales. Por esto, San Emeterio recuerda que «hay un teléfono gratuito desde que se instaló la empresa Ferrovial-Ferroser de 24 horas los 365 días al año».
Por este motivo el concejal responsable señala que «cuando respondo las incidencias de alumbrado remito al teléfono puesto que es inmediato», mientras que si se comunica a través de Línea Verde la solución tarda más tiempo en llegar.
Otras categorías
Al margen de estas tres primeras categorías, entre las que se alcanza un 45% del total, hay otras que tienen un menor peso, pero que en cualquier caso también salen a relucir en las estadísticas. Se trataría de otras como la ya mencionado de la recogida de basuras «el vandalismo, el mobiliario urbano, señales, retirada de vehículos, alcantarillado o puntos de agua», enumera San Emeterio.
Además de todo esto, el porcentaje en el que se engloban las interacciones que se han resuelto, o se han contemplado por parte del Consistorio, se mantiene más o menos fijo porque con la cifra total es difícil moverlo. Algo similar a lo que sucede en el caso de la incidencia de las diferentes categorías.
Sin embargo, la tendencia sigue siendo alcista y si hace un año se llagaba al 70% de situaciones resueltas, con tres años desde la implantación del servicio se llega «al 72%», resalta San Emeterio, lo que supone que se han solucionado más del mil quejas recibidas a través de Línea Verde.
En este sentido, el concejal vuelve a destacar que este mecanismo está planteado para incidencias menores « de inmediata ejecución», pero también aparecen algunas que «se repiten o requieren una mayor inversión». Por este motivo reconoce que algunas no se pueden solucionar y se quedan en el sistema porque «aunque las recogemos y las estudiamos no es la vía más adecuada», zanja.
Sin embargo, al margen de esta circunstancia, el responsable municipal indica que hay un 18% que todavía están como pendientes «y las que no proceden, están repetidas o la persona que lo envía se equivoca, rondan el 4%», destaca SanEmeterio, que está satisfecho con el funcionamiento.
«Esta es una aplicación más que damos al ciudadano y que tiene su aceptación», indica, aunque también destaca que no es el único modo con el que el Ayuntamiento recibe las quejas o sugerencias de los vecinos. En este sentido, también destaca la influencia de las redes sociales, donde la alcaldesa es una de las referencias más utilizadas, además de otros mecanismos que se pueden considerar más tradicionales y al margen de las nuevas tecnologías como es por ejemplo el teléfono gratuito del 010.